domingo, 20 de mayo de 2012

Métodos, materiales y recursos didácticos


Comunicación oral y escrita


La lengua extranjera en nuestras aulas


Hoy en día, la enseñanza de la lengua extranjera en nuestras aulas todavía resulta insuficiente. Desde un punto de vista lingüístico, los alumnos tienen diversas dificultades a la hora de aprender una segunda lengua. Aunque es algo muy beneficioso y fundamental, no sólo para el desarrollo del alumno extranjero, sino también para todos los alumnos en general, ya que ayuda a que los alumnos tengan una visión más amplia del concepto mundo.

Partiendo de mi experiencia personal en el aprendizaje de lenguas extranjeras, este aprendizaje, aunque es obligatorio, no es igual para todos. Actualmente muchos colegios están implantando programas bilingües ya que se han dado cuenta de la importancia del aprendizaje de una segunda lengua. En mi opinión, esta implantación debería haberse hecho hace muchos años, ya que el inglés lleva siendo el idioma de referencia desde hace más de 15 años.

En cuanto a las creencias generales que tenemos las personas hacia el aprendizaje de una lengua no materna, este aprendizaje resulta una tarea muy importante a desarrollar en las aulas. Además del inglés o el francés, dos idiomas que se están empezando a enseñar en algunos colegios son el alemán y el chino.  

Reflexiones metodológicas a partir del concepto de lengua


 Una característica importante sobre la lengua materna es que establece una unión entre las necesidades, los intereses y los logros de los individuos que la hablan. A partir de esta característica, se puede pensar que la llegada de alumnos extranjeros a las aulas con una lengua distinta contribuye a que los alumnos de las mismas “crezcan” culturalmente. Cabe mencionar que esta inmersión lingüística debe propiciar un ambiente de respeto y tolerancia, dos conceptos fundamentales a la hora de enseñar en un aula con alumnos extranjeros.

Hay que destacar que la relación que establece el alumno extranjero con la lengua de acogida es de vital importancia para el desarrollo positivo de los procesos de adquisición y aprendizaje.

En la enseñanza de una segunda lengua, la razón y emoción son dos conceptos que se entremezclan en el proceso de adquisición de una lengua de acogida.

El cerebro humano se divide en dos hemisferios cerebrales; el derecho y el izquierdo. El hemisferio derecho es sintético, establece relaciones, compara, reconstruye, procesa de forma simultánea y se maneja en procesos visuales y espaciales, y el hemisferio izquierdo se caracteriza por ser analítico, lineal y secuencial y está capacitado para el lenguaje en sus funciones de codificación y descodificación. A partir de esta información, hay que resalta que cuando los dos hemisferios trabajan conjuntamente, las personas percibimos el mundo y aprendemos  mucho mejor que cuando trabajan por separado, por este motivo, hay que propiciar en las aulas que se fomenten ambos hemisferios.

Trabajar en las aulas de esta forma conlleva más trabajo para el profesor que se ve compensado por mayor entusiasmo por parte del alumnado a la hora de aprender. Los alumnos aprenderían de acuerdo con su estilo cognitivo y facilitaría el desarrollo de diferentes estrategias de aprendizaje.

Actualmente se sabe que la inteligencia trabaja conjuntamente con la memoria, pero hay que señalar que el recuerdo funciona mejor si posee el mayor número posible de rasgos distintivos. Además la memoria humana es selectiva y puede alterar la realidad.
Las personas que llegan de fuera suelen idealizar su pasado, su cultura, etc. algo que representa una defensa de su propia identidad.

Gardner diferencia entre inteligencia lingüística, científico-matemática, espacial, musical, motora, interpersonal, intrapersonal y emocional. Las diferentes inteligencias deben contribuir al dominio conversacional y académico del español. La inteligencia lingüística resulta esencial para el aprendizaje de una segunda lengua.

En un aula, el profesor tiene que ser visto como un agente de integración socioeducativa y como coordinador de una interacción pedagógica flexible y plural.

Texto basado en el artículo de Mª Victoria Reyzábal; Algunas reflexiones metodológicas a partir del concepto de lengua